Octubre / 2022
Fuente semillana
Taller granadino
Autoría: Taller granadino
Cronología: c. 1890
Técnica: Torneado, moldeado, esmaltado
Medidas: 13 cm x 42 cm ø
Localización: Espacio V Centenario. Área de Reserva de Patrimonio
Colección: Colección de Cerámica Agustín Morales Alguacil – Fábricas de San Isidro (CAM). Donación
Número de inventario: 2306
Titularidad: Universidad de Granada
Descripción:
Esta fuente semillana o plato semillano forma parte de la Colección de Cerámica Agustín Morales Alguacil – Fábricas de San Isidro, compuesta por más de 400 piezas datadas entre los siglos XVI y XX y donada a la Universidad de Granada en abril de 2021.
La pieza, realizada en las postrimerías del siglo XIX, supone un buen ejemplo de cerámica granadina, modelada en arcilla, torneada en pella de barro y horma y esmaltada en blanco, para pasar después por un proceso de cocción en horno árabe. La decoración, repintada en azul, recurre a referencias asociadas a la producción tradicional granadina, en la que abundan los pájaros, las palmillas, los motivos geométricos y la vegetación, más o menos esquemática, plasmada mayoritariamente en forma de flores.
Siguiendo el esquema clásico en la iconografía de las cerámicas de Granada, un eje de simetría organiza la decoración de la torta, base de la fuente/plato profusamente ornamentada. Destacan aquí dos grandes flores de azucena que siguen la tradición islamizante de la decoración vegetal, de pétalos ovalados asidos a un círculo donde una filigrana reproduce un esquema repetitivo de formas lanceoladas dispuestas en torno al centro, sobre un entramado de ramas y hojas dividido por un tallo coronado por el perfil de una flor que armoniza el conjunto.
Tres cenefas recorren las alas de la fuente desde el borde hasta la unión con la torta. Creciendo en complejidad al acercarse al extremo, estas reproducen motivos ondulantes entrelazados entre sí generando anillos de tamaño creciente.
En cuanto a la tipología de la pieza, estamos ante uno de los productos más comunes de la cerámica granadina y también de las más sencillas, la fuente o plato semillano. Se trata de un plato intermedio entre el hondo y el llano, con un tamaño que oscila entre 25 y 30 cm. de diámetro y cuya función fue la de contener alimentos.
Biografía del autor:
La primera referencia documentada sobre la familia Morales y su vínculo con la producción de cerámica en Granada es Manuel Nicomedes Morales Jiménez, hijo de alfarero y nacido en 1837. Con la compra del desamortizado Convento de San Antonio, Manuel N. Morales funda una fábrica de cerámica, que su muerte pasó a llamarse “Viuda e Hijos de M. Morales” y a ser dirigida por los hijos del difunto, de entre los que destaca Manuel Morales Alonso, quien se forma en La Cartuja de Sevilla. Ya a comienzos del siglo XX comenzamos a encontrar referencias sobre la fábrica en el ámbito internacional, como su presencia en la Exposición Universal e Internacional de Bruselas de 1910 como “H. de M. Morales”, recibiendo un diploma y una medalla de plata por su participación.
Aconsejados por Natalio Rivas y Luis Seco de Lucena, los hijos de Manuel N. Morales cambiaron el nombre de la fábrica por el de “Fajalauza”, naciendo así el principal referente de la producción de cerámica en la ciudad de Granada.
De los descendientes de Manuel N. Morales, nuestro estudio se centra en la figura de Agustín Morales Alguacil (Granada, 1913-1999), hijo de Manuel Morales Alonso y Carmen Alguacil Rodríguez, quienes refundaron la fábrica “Cerámica San Isidro” en la carretera de Jaén en 1923, independizando su producción de la de sus hermanos.
Tras estudiar primaria en el Colegio Cristo Rey y el bachillerato en el Colegio de D. Joaquín Alemán Barragán, ambos en la capital granadina, comienza su trabajo en el taller familiar mientras cursa estudios en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Granada. En esta recibió clases de cerámica y de modelado con Isidoro Marín, Miguel Contreras Morales, Francisco Mariño, Antonio Martínez Olalla y Luis Molina de Haro, mientras que aprendió dibujo con Gabriel Morcillo. Finalizado este período de aprendizaje, complementa sus estudios en la Escuela Práctica de Cerámica de Manises (1940), donde se especializa en la técnica de reflejo metálico, y en la Escuela-Fábrica de Cerámica de Madrid (1943), comenzando a trabajar con artistas de la talla de Mariano Benlliure, Manuel González Martí y Jacinto Alcántara.
Dedicado desde 1944 a la dirección de “Cerámica San Isidro” y a la docencia en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Granada, son numerosos sus trabajos en el ámbito artístico, así como sus colaboraciones en publicaciones e investigaciones en torno a la cerámica, dejando a su muerte como legado la presencia de numerosos discípulos que aún hoy perpetúan la tradición de la cerámica en Granada.
Igualmente numerosos son los premios y distinciones que Agustín Morales recibe a lo largo de su trayectoria, destacando la Segunda Medalla de Plata en la I Exposición Internacional de Artesanía (1953), la Medalla de Honor en la Exposición Artesanal (1976), el nombramiento como Artesano Ejemplar de España por SS. MM. Los reyes de España (1977), o la Placa de Oro de la Junta de Andalucía (1983).
Enlaces a recursos digitales:
https://veu.ugr.es/informacion/noticias/donacion-ceramica-agustin-morales-alguacil-fabricas-san-isidro
Bibliografía:
Cano Piedra, C. y Garzón Cardenete, J.L. (2009). La cerámica en Granada. Granada: Los Libros de la Estrella.
Garzón Cardenete, J. L. (2001). La cerámica de Fajalauza. Narria: estudios de artes y costumbres populares, (93), 24-30.
Ruiz Ruiz, H., y Morales Jiménez, A. (2001). Agustín Morales Alguacil y la cerámica granadina en el siglo XX. Narria: Estudios de artes y costumbres populares, (93), 31-39.